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Pastores hispanos rechazan fallo de la Corte Suprema que restringe la ciudadanía por nacimiento

Pastores hispanos rechazan fallo de la Corte Suprema que restringe la ciudadanía por nacimiento

Edificio de la Corte Suprema de Estados Unidos | Nicole Alcindor/Christian Post

La decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos de avalar una orden ejecutiva que limita el derecho a la ciudadanía por nacimiento ha provocado una firme reacción por parte de algunos líderes cristianos hispanos. 

La medida, respaldada por seis votos contra tres en el caso Trump v. Casa, Inc., permite a la Administración Trump restringir la ciudadanía automática a hijos de inmigrantes no autorizados nacidos en territorio estadounidense.

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Uno de los pronunciamientos más contundentes provino de Carlos Durán, presidente de la Alianza Nacional de Pastores Hispanos (NAHPA) y reconocido defensor provida. Durán calificó el fallo como un ataque a la dignidad humana y a los principios fundamentales de la nación. “Negar la ciudadanía a los bebés nacidos en suelo estadounidense no es duro, es cruel”, afirmó.

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En su declaración pública, Durán expresó su profunda preocupación desde una perspectiva cristiana conservadora: “Desgarra la esencia de nuestro compromiso con la vida, la familia y la identidad nacional. No podemos construir un futuro mejor descartando a los niños en su punto más vulnerable”. Para NAHPA, la decisión judicial no sólo es legalmente problemática, sino también moralmente peligrosa.

La postura de NAHPA se basa en la defensa de los principios bíblicos que valoran toda vida humana, nacida o por nacer. La organización considera que esta decisión judicial contradice esos valores y sienta un precedente que podría afectar negativamente a futuras generaciones de niños nacidos en Estados Unidos.

Durán instó además a los líderes conservadores a no ceder ante presiones políticas, recordando que la verdadera justicia se fundamenta en la defensa de la dignidad humana. “La conveniencia política nunca debe prevalecer sobre la dignidad humana fundamental”, señaló. A su juicio, aceptar estas restricciones representa un riesgo de “desmantelar el fundamento moral que mantiene a nuestra sociedad arraigada en la fe, la familia y la libertad”.

La Alianza Nacional de Pastores Hispanos (NAHPA) ha reiterado su papel como voz de la Iglesia Cristiana Hispana ante el gobierno, enfatizando su compromiso con los valores de vida, familia y libertad religiosa. En esta ocasión, considera que el fallo judicial compromete los cimientos espirituales y éticos del país.

El caso ha despertado preocupación más allá del ámbito legal, especialmente entre comunidades religiosas que ven en la ciudadanía por nacimiento no sólo un derecho constitucional, sino una expresión de justicia para los más vulnerables. Para organizaciones como NAHPA, limitar este derecho implica ignorar la compasión y la responsabilidad cristiana hacia el prójimo.

En medio del debate nacional sobre inmigración, derechos civiles y valores morales, la voz de líderes como Carlos Durán destaca como un llamado a no sacrificar los principios fundamentales en nombre de la conveniencia política. La decisión de la Corte, si bien definitiva en términos jurídicos, ha reavivado un debate ético que continúa dividiendo a la nación.